Al comienzo me sentía mal porque no lograba concentrarme y organizarme, luego entendí que estar de novia es una experiencia de una vez en la vida y en vez de juzgarme y sentirme mal, me dediqué a disfrutar del presente y vivir el momento.
Muy aparte de la organización de la boda, por más sencilla que sea, estaba (estoy) en un proceso de mudanza y ese cambio me ha paralizado un poco en lo personal y en el trabajo. Sin embargo vendrán cosas muy positivas para el atelier y próximos proyectos.
Estoy muy emocionada de preparar, ahora si, el contenido del proceso de la boda, mis experiencias personales y cada detalle con mucha ilusión. Por otro lado, si quieres algún consejo, escríbeme personalmente para asesorarte en lo que necesites, el haber estado de novia me ayudó mucho a entender este proceso y ponerme en tus zapatos, estaré feliz de ayudarte.
¡Nos vemos en los próximos post!
Fotografía: Hermosa Aventura